Se trata de Jorge Felipe Carreño Sanchez quien obtuvo más de 44 mil votos en 2019 con miras a la Alcaldía de la ciudad de Villavicencio.
Tras perder por una diferencia de 4354 con Felipe Harman, Carreño llegó al concejo de la capital del Meta por obtener la segunda mayor votación, según lo establece el artículo 25 de la ley de equilibrio de poderes 1909 del 2018.
Pese a que sus votantes esperaban que realizara un trabajo excepcional y de control político en el Concejo Municipal, Carreño llegó a ser parte de los concejales que respaldaron al alcalde Felipe Harman. Sabía que tenía que sacarle provecho a su nuevo cargo.
En septiembre de 2020, un año después de las elecciones, Carreño hizo público ese respaldo en diferentes medios de comunicación digital local. Dicha decisión tomó por sorpresa a miles de ciudadanos que le dieron su voto de confianza.
Inició su trabajo en la corporación y se esperaba que fuera la sorpresa, sin embargo, en el transcurso de ese mismo año, Felipe Carreño tan solo hizo parte de tres proyectos de acuerdo (propios) cuya autoría surgió de concejales que le permitieron ser coautor. Es decir, como pasa en los colegios, le permitieron hacerse en el grupo para tener buena nota.
En 2021 aún siendo concejal de apoyo al gobierno, las cifras fueron similares, participó tan solo en tres proyectos (propios), en donde le permitieron ser coautor.
Para 2022 y luego de que al parecer se terminara la mermelada, Felipe Carreño se mostró crítico al gobierno de Felipe Harman y junto a un par de concejales, empezó a ejercer una tibia oposición. Ese año el concejal David Fernando Barbosa le permitió ser coautor de uno de sus proyectos.
En abril de 2023 el concejal Carreño anunció que renunciaba a la corporación con el fin de dedicarse a su campaña política con miras a la Gobernación del Meta. En los primeros meses de este año, ni presentó, ni hizo parte de proyectos de autoría propia de los concejales según lo establecen los registros del Concejo. Es decir, en los tres años y 4 meses que tuvo la credencial, tan solo participó en la presentación de 7 proyectos de autoría propia y eso porque lo llevaron de arrastre. Como dicen en las calles, al parecer se la pasó calentando puesto.
Hoy, este político aspira a quedarse con uno de los cargos más importantes del departamento del Meta (La Gobernación), con el apoyo de un representante a la Cámara y un mandatario actual del Meta.
Muchos se preguntan, si tener ese respaldo y la maquinaria le alcanzará para ganarse los votos y la confianza de los metenses, pese a que los resultados de su gestión y participación en política no lo favorecen, no ha sido la mejor.
Columna de Opinión: Steven Liévano
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