La entrega de 50 títulos de propiedad del caso emblemático de Las Pavas se convierte hoy en un hito para el Gobierno del Cambio, que con su voluntad política destrabó un proceso que durante más de 40 años fue muestra de la gravedad del conflicto por la tierra en el departamento de Bolívar.
Los hoy propietarios, e históricamente dueños de la tierra, son 50 familias que hacen parte de la Asociación de Campesinos de Buenos Aires (ASOCAB). Estas familias, que han sido víctimas de actos violentos de despojo, avanzan hoy el camino hacia la reparación en un acto de justicia.
Desde 2012, estos predios fueron revertidos a la Nación mediante extinción agraria por el incumplimiento de la función social de la propiedad. De las 2.675 hectáreas que componen esta hacienda, desde hace 8 años el Estado colombiano hubiese podido avanzar en la adjudicación de los baldíos reservados que corresponden a los predios de Las Pavas, Si Dios Quiere y Peñalosa, ubicados en los municipios de El Peñón y San Martín de Loba. Tras la labor de la Agencia Nacional de Tierras, hoy se adjudican 958 hectáreas a 50 familias, de las 123 que hacen parte de este caso.
Misael Pallares Guerrero, líder emblemático de ASOCAB, dio las gracias públicas en el acto de entrega, “porque nos permitió tener lo que tanto habíamos anhelado, que eran los títulos de la tierra”. Y añadió que “nuestro alcalde les mostró algo que nos hace falta para completar o complementar estos títulos, para que nosotros los campesinos produzcamos los alimentos: para ellonecesitamos las vías; para la juventud necesitamos colegio”.
En este sentido, la ministra de Agricultura y Desarrollo Rural, Martha Carvajalino, aseguró que “esta adjudicación, y es el llamado del Ministerio de Agricultura, debe estar acompañada por el conjunto del Sistema Nacional de Reforma Agraria, para que aquellos bienes y servicios que requieren estas tierras para producir alimentos sean rápidamente dispuestos. Necesitamos que el Ministerio de Transporte nos acompañe facilitando las vías terciarias para habilitar y producir. Necesitamos que el Ministerio de Comercio acompañe a estas familias en los procesos de producción, industrialización y comercialización. Necesitamos que la Agencia de Desarrollo Rural ingrese de inmediato a acompañar a estas familias con proyectos productivos que permitan una incorporación cierta y efectiva en los circuitos económicos de la región. Necesitamos hacer que estas más de 1.500 hectáreas sean hoy tierras productivas, tierras de gobernanza ambiental, tierras de gobernanza por la tierra”.
Durante la jornada también se realizó la entrega de los títulos correspondientes a los predios Chipre 1, Chipre 2 y Hacienda El Porvenir, beneficiando a 43 familias del municipio de Río Viejo, en el sur de Bolívar.
En total se entregan 43 títulos de adjudicación correspondientes a 853 hectáreas de bienes fiscales patrimoniales que había comprado el extinto Incora en 1989 para dotar de tierra a la población campesina. Así, en otro hito, el Gobierno del Cambio hace hoy la adjudicación de esos bienes en favor de 43 familias.
A su turno, el director de la Agencia Nacional de Tierras, Felipe Harman, subrayó, con “profunda emoción, que este comité de recuperación tiene también unos retos sustanciales en distintas partes del país. Venimos haciendo recuperación de ciénagas y playones también en Arjona, aquí en el departamento de Bolívar.
La idea es que se desarrolle toda esta política de recuperación de tierras del Estado en todo el Caribe, porque es una fuente importante de tierras para la Reforma Agraria. Es muy importante ratificar también en este sentido la unidad del movimiento campesino para defender la Reforma Agraria”.
Las hectáreas entregadas hoy en los casos Las Pavas y Chipre se suman a las 1.137.766 hectáreas formalizadas por la Agencia Nacional de Tierras durante el Gobierno de Gustavo Petro, ratificando el compromiso con la implementación del Acuerdo de Paz y la Reforma Agraria, tal como lo aseguró el presidente Gustavo Petro.
“Nos llenamos de alegría al hacer justicia. Hacer justicia no es sino devolver el derecho, devolver la tierra que se robaron. Este caso se volvió un símbolo de la lucha del campesinado colombiano por la tierra. Este es un gobierno que devuelve la tierra, y debe hacerlo masivamente”, enfatizó el mandatario.
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